¿Qué son las ostomías?
Es una técnica quirúrgica en la que se realiza una derivación de un órgano (generalmente intestino o vías urinarias) al exterior por un orificio diferente al orificio natural. Las ostomías de eliminación pueden ser digestivas (ileostomía o colostomía) y urinarias (urostomia). También se pueden realizar ostomias para la administración de alimentación enteral (nutrición enteral).
Estos orificios contra natura no están exentos de complicaciones que pueden ser leves o incluso graves para los pacientes, como por ejemplo las siguientes que suelen darse con más frecuencia:
- Necrosis por compromiso vascular del asa intestinal que está implicada.
- Estenosis (estrechamiento) derivados por procesos infecciosos con inflamación de la zona.
- Prolapso con salida de un tramo intestinal por ser demasiado grande o por falta de fijación del mesenterio a la pared abdominal.
- Retracción secundaria a necrosis o por tracción de estoma.
- Hernia paraestomal por debilidad muscular de la pared.
Desde enfermería, el auxiliar como profesional que prestará los cuidados higiénicos debe tener en cuenta una serie de medidas, como:
- Manejo correcto de los dispositivos colectores (discos adhesivos y bolsas), siempre elegir el más adecuado para el paciente.
- Evitar el exceso de contenido en las bolsas cambiando con cierta asiduidad para evitar fugas que incomodarán y producirán quemazón y prurito de la zona.
- Aprovechar cada cambio de dispositivo para inspeccionar el estoma y la piel periestomal (de alrededor).
- Vigilar la aparición de complicaciones generales o sistémicas derivadas del proceso.
- Vigilar las características y la cantidad de materia eliminada por el estoma (color, consistencia, etc).
- Vigilar si aparecen signos de palidez tanto del estoma como del paciente.
- Vigilar y controlar si aparece diarrea y/o estreñimiento como alteración del patrón de eliminación intestinal normal del paciente.
Es importante para el cambio de bolsa tener en cuenta el tipo de dispositivo que se utiliza, por ejemplo, si se usan bolsas de dos piezas siempre se cambiará el disco adhesivo cuando haya sospecha de fuga o comience a despegarse los bordes, si el disco adhesivo se mantiene en buenas condiciones se puede dejar unos 3 o 4 días e ir cambiando la bolsa periodicamente. En el caso de bolsas de dos piezas cerradas se debe cambiar la bolsa todos los días o cuando el contenido sea superior a la mitad de su capacidad de almacenaje. Si son bolsas de dos piezas abiertas se recomienda un vaciado cuando se supere la mitad de la capacidad.
Por:
Iolanda Muñoz
Docente Rama Sanitaria
Etiqueta:enfermedad crónica, Enfermería, salud