Onicofagia, onicomicosis, ¿cuestión de uñas?
Las uñas son el resultado de la superposición de varias láminas de queratina que desde la matriz discurren por el lecho ungueal situado en la cara dorso-distal de los dedos. Su función es colaborar en la motricidad fina y sensibilidad de las manos, presión o rascado de pequeñas cosas. Las uñas sanas pueden presentar forma ovalada y de color parcialmente rosado, siendo el crecimiento más rápido en las uñas de las manos (de 4 a 5 veces más rápido que las uñas de los pies).
La onicofagía, es el hábito de morderse o comerse las uñas y, lo padece más del 30% de los adolescentes y algo más del 5% de los adultos. Esta situación es desencadenada por el estrés y angustia que puede generar las diferentes situaciones de la vida de las personas. También es importante tener en cuenta que este hábito puede acarrear infecciones en las uñas, así como deformidades estéticas de los dedos, labios y en la forma de los dientes. Es un trastorno que debe ser tratado por el dermatólogo y psicólogo que trate el origen del estrés o ansiedad, las onicopatías son cualquier alteración que involucre a la uña.
Dentro de las infecciones que atacan a las uñas están las bacterianas que producen cambios de coloración, pústulas y dolor. Las infecciones por hongos, también llamadas onicomicosis, afectando más a las uñas de los pies que a las de las manos. Los síntomas son: cambios de coloración, volviéndose opacas, amarillentas, marrón, grises, engrosadas o despegadas. Es frecuente en climas humedad y calor, favoreciéndose con calzado cerrado, visita a lugares públicos como piscinas y en ocasiones se acompañan con otro tipo de infecciones de la piel como la tiña de los pies (conocida como pie de atleta). Dentro del grupo de las infecciones virales se encuentran las verrugas, que forman alrededor de las uñas engrosamientos tipo callos, contagiosas y antiestéticas.
En cuanto a las enfermedades inflamatorias que alteran la forma normal de las uñas están las alergias por contacto, la psoriasis, el liquen plano, etc. Las uñas también pueden manifestar cambios que reflejan enfermedades cardiacas, pulmonares (cianosis o color azuloso por falta de oxigeno), o cambios en su forma como los llamados dedos en forma de palillo de tambor. Otras a veces secundarias a ingesta de medicamentos, tumores benignos y malignos, malformaciones congénitas o adquiridas como la onicocriptosis (uña encarnada).
Por:
Iolanda Muñoz
Docente Rama Sanitaria
Etiqueta:autoestima, higiene, salud