Tips para reforzar el sistema inmunitario
Cuando hablamos del sistema inmunitario nos referimos a las defensas que tiene nuestro cuerpo para enfrentarse a todo tipo de patógenos. Es decir, virus, bacterias, hongos y parásitos. Por eso, siempre es importante fortalecer el sistema inmunitario, en especial en las épocas de frío o cambios de estación.
En este artículo te damos algunos tips para reforzar el sistema inmunitario. Porque, en cuanto a la salud, siempre es mejor prevenir que tener que tratar.
Factores que debilitan el sistema inmunitario
Al referirnos a los factores que afectan a nuestras defensas tenemos que diferenciar entre dos tipos:
- En primer lugar, los que tiene que ver con nuestra propia genética y estado de salud. Por ejemplo, la edad, la alimentación, si sufrimos alguna enfermedad e incluso nuestras emociones.
- Por otro lado, los factores externos serían la contaminación y otras sustancias tóxicas a nuestro alrededor, así como los cambios de estación y los propios patógenos que hemos citado.
Podemos decir que unos y otros debilitan nuestro sistema inmunitario hasta que enfermamos. Por eso hay que reforzar nuestras defensas con buenos hábitos.
Tips para reforzar el sistema inmunitario
A continuación facilitamos 7 tips para reforzar el sistema inmunitario mediante cambios en nuestro estilo de vida:
Llevar una alimentación equilibrada
En primer lugar, la alimentación siempre es clave en nuestra salud. De nosotros depende que nos nutra y aporte lo que nuestro organismo necesita, o bien que nos perjudique y, a largo plazo, nos haga enfermar.
Debemos apostar por una dieta equilibrada, variada y nutritiva en la que no falten frutas y vegetales crudos, grasas saludables, proteína de buena calidad y carbohidratos complejos (cereales integrales, legumbres, patata…).
Además, también podemos hablar de determinados alimentos que pueden aumentar nuestras defensas:
- Frutas cítricas
- Frutos rojos
- Vegetales de hoja verde
- Ajo y cebolla
- Frutos secos
- Aceite de oliva
- Pescado azul
- Cereales integrales
- Miel de abeja
Tratar las carencias nutricionales
Es importante que nos hagamos una analítica por lo menos una vez al año, sobre todo si tenemos algún problema de salud. Este hábito nos ayudará a detectar posibles carencias de vitaminas y minerales. A partir del diagnóstico, el médico podrá recetarnos los suplementos o medicamentos adecuados para tratar esa deficiencia.
Beber agua
No debemos despreciar el hábito de beber agua a lo largo del día, sobre todo en ayunas y fuera de las comidas. Una deshidratación prolongada va a afectar de manera muy negativa a nuestro organismo.
¿Te cuesta acordarte de beber agua? Te damos una idea original. Añade a tu botella de agua algunos trozo de fruta o plantas aromáticas para disfrutar de una deliciosa y apetitosa agua saborizada.
Evitar los hábitos tóxicos
El médico siempre te dirá lo mismo: el abuso del tabaco y el alcohol no solo perjudican a la salud, sino que también puede agravar cualquier afección que tengas. Los tóxicos presentes en estos productos también contribuirán a debilitar tus defensas.
Hacer ejercicio físico
Practicar algún deporte de intensidad moderada varias veces por semana nos ayuda a estar en forma. No obstante, también es un excelente hábito para mejorar nuestro sistema inmunitario, ya que nos ayuda a nivel cardiovascular, óseo, hormonal, respiratorio, etc.
Tener un descanso de calidad
No siempre se trata de dormir más, sino de descansar mejor. Las horas de descanso nocturno son necesarias para que nuestro organismo recupere las energías y repercuten en nuestro sistema inmunitario.
Un descanso inadecuado nos llevará a un estado de estrés, agotamiento e irritabilidad que, a largo plazo, nos puede hacer enfermar.
Adiós al estrés
El último de estos tips hace referencia a un mal muy común de esta época: el estrés. Este afecta a nuestro sistema nervioso y altera la producción de hormonas y neurotransmisores. Por ello, es fundamental que hagamos cambios en nuestro estilo de vida para evitar todo aquello que nos estresa.
Por último, no olvides que ante cualquier molestia o síntoma es recomendable acudir al médico y realizarte un chequeo de salud, por lo menos una vez al año.