¿Cómo afecta el sedentarismo a los niños?
La falta de actividad física en la infancia es uno de los problemas más importantes que nos encontramos en nuestro siglo. El cambio en los estilos de juego y entretenimiento están preocupando seriamente a la comunidad sanitaria, si quieres saber por qué, sigue leyendo atentamente.
La palabra sedentarismo hace referencia a un estilo de vida o hábito caracterizado por hacer poco ejercicio. La sociedad ha cambiado, lejos queda ya el ir a los lugares habituales a pie como antaño (colegios, parques, plazas, etcétera), también es cierto que las horas de ocio y juego que pasábamos en la calle ya no son habituales en las nuevas generaciones. Ahora las horas de extraescolares están llenas de actividades que, en una gran mayoría, no requieren de mucho movimiento físico o se cambia salir a jugar a la calle por la videoconsola y otras tecnologías lúdicas sedentarias.
¿Sabes que les ocurre a los huesos si no hay movimiento?
El calcio que es uno de los minerales indispensables para la formación y el mantenimiento de los huesos deja de fijarse en estos por falta de actividad (movimiento). Desde la infancia hasta la juventud (más o menos hasta los 30 años), nuestro organismo crea buenos depósitos, por lo tanto se puede decir que se alcanza la máxima masa ósea que será vital para la futura salud de los huesos sobre todo en las niñas que llegarán a ser mujeres menopaúsicas. Los osteoblastos, que son las células formadoras de hueso se activan sobre todo con el ejercicio y gracias a las vitaminas D y K estos se hacen más duros y resistentes.
En cuanto a los músculos, el ejercicio también mantiene una correcta masa y tono muscular, así como, más flexibilidad y coordinación psicomotriz que dan salud al aparato locomotor y al organismo en general. No hay que olvidar, que el ejercicio también evita o reduce la obesidad infantil que supone un gran problema en la actualidad por el gran aumento de casos.
¿Qué podemos hacer para mejorar y prevenir una mala salud ósea?
En la infancia es importante tener en cuenta los siguientes consejos para crecer y mantener una buena salud del aparato locomotor:
- Dormir 8 horas diarias para que la hormona del crecimiento tenga tiempo de activarse y favorecer el crecimiento de los huesos.
- Llevar una alimentación equilibrada y variada de alimentos para garantizar que no falte ningún nutriente importante (Proteínas, minerales, vitaminas, etcétera).
- Ejercicio regular, tanto en el ámbito escolar como extraescolar.
- Tener una actividad lúdica menos sedentaria en la que implique juegos en la calle como, por ejemplo, correr, saltar, etcétera.
La salud futura de los huesos de nuestros hijos dependerá de lo que hagan, como se alimenten y descansen en la infancia.
Por:
Iolanda Muñoz
Docente Rama Sanitaria
Etiqueta:Deporte, Fisioterapia