Cuando el animal que tenemos en casa es un cachorro deberemos administrarle más dosis de vacunas que si esa mascota ya es un adulto. Hay que recordar  la importancia de desparasitar previamente al cachorro para que no tenga ningún tipo de parásito y pueda actuar la vacuna eficazmente.

Se empieza con la primera dosis a partir de las 6 semanas con unas vacunas especiales para cachorros. Esta vacuna empezará a dar inmunidad  contra la Parvovirosis Canina y contra el Moquillo, Adenovirus Canino y la Leptospirosis en el caso de la llamada comúnmente vacuna Trivalente.

El Parvovirus es una enfermedad vírica muy agresiva en cachorros que cursa sobre todo con una gastroenteritis severa que incluso puede causar en muchas ocasiones la muerte del animal.

El Moquillo canino es una enfermedad vírica que actúa tanto en el sistema respiratorio, como digestivo e incluso puede afectar el sistema nervioso del siendo también mortal en muchos casos.

El Adenovirus canino es un virus que provoca desde un estado febril sin importancia hasta una Hepatitis Infecciosa Canina muy grave donde puede peligrar la vida del animal.

La Leptospirosis es una enfermedad producida por una bacteria que simplemente se puede contagiar por beber agua contaminada o a través de la orina de los animales infectados. La enfermedad puede ser aguda o crónica diseminando bacterias a través de su orina y al ser una Zoonosis los humanos también se pueden contagiar.

La segunda dosis de vacuna protege contra todos los virus y la bacteria descrita anteriormente llamada vacuna Tetravalente y repetimos una tercera dosis para inmunizar bien al cachorro.

A partir de los 6 meses de edad se vacuna contra la Rabia.

Al año siguiente se puede revacunar al perro con la misma vacuna que utilizaríamos para un perro adulto llamada Hexa o Heptavalente y que engloba la Rabia y las enfermedades vistas anteriormente.

Otras vacunas menos conocidas que existen en el mercado son:

La vacuna contra la Tos de las Perreras, también llamada Traqueobronquitis Infecciosa Canina, producida comúnmente por un virus y a veces también por una bacteria y que es muy común en zonas donde hay gran número de animales. Provoca  síntomas parecidos a un “resfriado”.

La vacuna contra el Coronavirus canino es un virus que cursa de forma parecida al Parvovirus Canino aunque con un poco menos de virulencia, indicada en animales con el Sistema Digestivo sensible.

La vacuna contra el Herpesvirus se utiliza en criaderos para proteger a las hembras de posibles abortos. La vacuna se administra sólo en las perras embarazadas mediante dos dosis.

La vacuna contra la Piroplasmosis canina o Babesiosis es una vacuna contra un parásito que llega al animal a través de las garrapatas dando cansancio y fiebre muy rápidamente. Es importante cogerla a tiempo para tratarla y que no resulte de gravedad.

Por:
Ferran Solanes
Colaborador Dpto. Veterinaria