Cualquier mascota, indistintamente de la raza que sea, necesita un periodo de socialización para poder desenvolverse con total normalidad en nuestra sociedad. La relación con nosotros, con otros animales y con nuestro entorno va a ser determinante para poder disfrutar, en cualquier momento, de nuestra mascota.

Si tenemos una mascota dócil, sin problemas de comportamiento y bien educada está claro que será mucho más fácil que tengamos ganas de llevárnosla de excursión, de viaje o de paseo que si es un animal conflictivo. Para que esto sea así tenemos que empezar de muy pequeño con su educación:

• En el momento que nace podemos empezar a tenerlo en brazos para que ya se acostumbre a nuestro olor y a nuestro contacto.
• A las tres semanas el perro ya puede reconocer estímulos de nuestro hogar, como son el timbre, las voces, el televisor, la radio, la lavadora, etc.
• A partir del mes y medio es importante que se relacione con todos los miembros de la casa y empiece a reconocer las distintas zonas de la casa. También hay que seguir tocándolo y acariciándolo para que después desarrolle un buen carácter.
• A las 6 semanas empieza el periodo de sensibilización, vital para el desarrollo del perro. En este momento es importante dejar al cachorro sólo durante un espacio corto de tiempo que después iremos ampliando; este ejercicio sirve para intentar no tener más adelante problemas de ansiedad por separación.
• Hacia las 8 semanas empezaremos a acostumbrarlo al collar y a la correa porque en breve coincidirá con que el perro ya lleva todas las vacunas y podrá salir a la calle. Es necesario que se acostumbre al tráfico, a las voces altas, a los amigos, a la música, etc.
• A las 12 semanas ya podremos salir con él de viaje, acostumbrarlo al coche o si hace falta incluso al avión o al barco, relacionarse con otros perros del vecindario y llevarlo a zonas nuevas donde pasear para que conozca otras zonas y otros olores. Cuando está totalmente vacunado es cuando puede ir a las zonas de ocio de los perros para que juegue. Hay que evitar el contacto con perros agresivos para que no tenga un efecto negativo sobre el animal
• A las 15 semanas se acaba el periodo de sensibilidad, en caso de adoptar un perro con una edad superior puede ser que nos cueste un poco más socializarlo.

En algunos casos podemos encontrar en el mercado feromonas artificiales que ayudan a que el animal esté en un estado de mayor calma y seguridad. Se usan para cualquier situación que para nuestro perro signifique una situación de stress.

Por:
Ferran Solanes
Colaborador Dpto. Veterinaria