Cuando tenemos una mascota en casa es nuestra responsabilidad cuidarla y alimentarla   bien, y eso implica hacer una serie de revisiones durante el año en el veterinario.

En esas revisiones periódicas valoramos:

• Revisión general del perro. Normalmente se mira que la temperatura sea la correcta, las constantes vitales, es decir, se ausculta para ver que el animal respire bien, se escucha el ritmo cardíaco, también es muy importante el control del peso para prevenir el sobrepeso e incluso la obesidad, enfermedad muy común en los animales de compañía, etc.
• Recordar la desparasitación del animal cada 3 o 4 meses para que no tenga ningún parásito interno y también protegerlo externamente para prevenir las pulgas y garrapatas, principalmente, sobretodo en época calurosa.
• Si el animal está al día en cuanto a las vacunas se refiere. El primer año hay que revacunar al perro o gato y después sólo es necesario un recordatorio anual.
• Si hay algún síntoma de enfermedad. Externamente podremos valorar los problemas de piel, de oídos o de ojos, por ejemplo, y para saber si el animal tiene algún problema interno deberemos realizar pruebas complementarias como son análisis de sangre o de orina, ecografías, radiografías, endoscopias, etc.
• Si hay que hacer alguna intervención quirúrgica.
• La alimentación. En el mercado existen infinidad de marcas de piensos y latas para poder encontrar la adecuada y que le guste a nuestra mascota. Cada edad necesita cubrir unas necesidades especiales en cuanto a nutrientes y por eso iremos variando el tipo de comida.
• Que el animal tenga la tarjeta sanitaria, la tarjeta donde consta el número de microchip, que hay que recordar que es obligatorio y que nos ayuda en caso de pérdida. En el caso de tener que viajar al extranjero nuestra mascota también tendrá que llevar el pasaporte.

Por lo tanto, el beneficio principal de llevar nuestra mascota al veterinario de forma regular es certificar su buen estado salud o en caso contrario, encontrar los problemas o las enfermedades en un estado inicial donde poder actuar antes de que se complique.

En muchas ocasiones nuestra mascota fallece por motivos donde no podemos hacer nada, como por ejemplo en caso de accidente, pero en muchas otras ocasiones, el hecho de realizar estas revisiones periódicas seguro que ayuda a alargar la vida del animal y aumenta la de verlo envejecer junto a nosotros con una buena calidad de vida.