5 consejos en caso de quemaduras
¿Las quemaduras? son lesiones producidas en la piel y otros tejidos a consecuencia de la exposición a una fuente de calor que puede ser: física, química o eléctrica, ¿sabes qué debes hacer para aliviar la quemazón y el dolor?
Las quemaduras se clasifican en función de la profundidad de tejidos afectados y la extensión de piel quemada. Según la profundidad hablamos de primer, segundo o tercer grado y en función de la extensión, nos referimos a porcentajes (%) de piel quemada.
Las de primer grado afectan a la epidermis que es la capa más superficial de la piel produciendo un enrojecimiento de la misma. Las de segundo grado afectan a la epidermis y dermis apareciendo las ampollas y, las de tercer grado ya afectan a toda la piel e incluso otros tejidos más profundos produciendo la necrosis (muerte) o carbonización de los tejidos. En cuanto a la extensión se utiliza la regla de los “9” o de “Wallace”, donde cada parte del cuerpo equivale a un 9% de extensión (por ejemplo, la extremidad superior).
La gravedad de la quemadura se determina por el grado y la zona o zonas quemadas, así como, la edad también es un factor que puede agravar la situación como es en el caso de los niños y los ancianos.
Muchas quemaduras ocurren de forma accidental y son de origen doméstico, como, por ejemplo, las que se originan cocinando, manipulando sustancias o por contacto con la corriente eléctrica. Pero lo que no sabemos es que todos en algún momento de nuestra vida o de forma habitual sufrimos una quemadura de primer grado derivada de la exposición al sol en la playa o la montaña sin protección adecuada.
¿Qué podemos hacer en caso de quemadura?
Aunque siempre es necesario que una quemadura sea valorada por un médico, existen una serie de pautas que pueden ayudar tanto a mejorar los síntomas presentes como a no producir más daños en los tejidos. A continuación, te explicamos que cosas puedes hacer:
- Colocar la zona quemada debajo del grifo de agua fría, mínimo diez minutos para revertir el calor producido en los tejidos y así no seguir dañándolos más. Si es muy extensa la zona, llevar a la persona debajo de la ducha.
- No colocar pasta dentífrica ni otros ungüentos de la sabiduría popular (como patata, hielo, barro, lejía, etcétera).
- Si la ropa está adherida a la piel no retirarla, dejarla mojada y tapar a la persona con una manta.
- No administrar ningún tipo de medicamento hasta la valoración de los equipos de emergencias.
- En caso de quemadura solar puede aplicar cremas específicas de cortisona (típicas de quemaduras y picaduras de insectos) o ricas en vitamina C y E que ayudarán a la regeneración más rápida de la piel. Beber agua para hidratar esa pérdida en los tejidos también es fundamental.
Estos consejos son básicos y te ayudarán a paliar el dolor y las lesiones hasta que un médico pueda pautar un tratamiento adecuado en función del tipo de quemadura.
Por:
Iolanda Muñoz
Docente Rama Sanitaria
Etiqueta:Enfermería, Lesiones, Vendaje